top of page

Como todo en la vida, el deseo erótico no sería diferente.

  • Foto del escritor: Claudia Carvalho
    Claudia Carvalho
  • 8 nov
  • 2 Min. de lectura

Cuando vamos a la cama, no hacemos sexo tú y tu pareja, sino que llevamos las creencias, los mitos. Existe una idea sobre el deseo sexual que debería ser lineal, constante, y esa idea crea una presión innecesaria, especialmente en las relaciones de largo plazo. El deseo sexual es un proceso dinámico e influenciado por diversos factores internos y externos. Tenemos que entender que, como todo en la vida, el deseo erótico no sería diferente; a veces el deseo puede ser más fuerte en ciertos momentos y más tenue en otros, dependiendo de todo lo que esté en juego en nuestra vida. No podemos esperar que una mujer esté veinticuatro horas con la libido alta después de un día lleno de trabajo fuera de casa y dentro de casa, o que el deseo en la dinámica de la pareja sea el mismo con la misma intensidad después de diez años de relación. La realidad es que el deseo sexual no es lineal y tampoco se puede “recuperar”.

¿Cómo así, Claudia?

Hay otro mito, una enseñanza errónea que veo muchos profesionales reforzando: la idea de “recuperar el deseo”. No se puede recuperar el deseo sexual. No se puede tener el mismo deseo sexual que cuando empezaste la relación. Se puede trabajar en el deseo, partiendo del punto en el que estás, e incluso puede ser mejor que antes, pero no se puede recuperar.

 

Sé que esta es una perspectiva potente y disruptiva, pero es justamente sobre estos temas que pocos se atreven a cuestionar. El deseo, al igual que otros aspectos de la vida, no es algo fijo ni algo que se pueda restaurar como si fuera un objeto físico. Lo que sí se puede hacer es adaptarse a las nuevas realidades y trabajar en nuevas formas de exploración.



Por Claudia Carvalho

Sexóloga

Libro: PORQUE SÍ:Cómo tener sexo todos los días

Pide tu cita previa 623 365342

Comentarios


bottom of page